La localidad asturiana de Avilés va a contar a partir de ahora con una red de establecimientos adaptados a los celíacos que se agruparán en una guía y que contarán con un sello específico que les hará formar parte de una red de locales con seguridad para este colectivo.
Antes, los dueños y trabajadores de esto establecimientos van a recibir una formación por parte de técnicos para el correcto trato de los productos.
Por el momento ya van 24 establecimientos de la localidad que se han interesado por el proyecto, impulsado por Eugenia Téllez, más conocida en redes como asturceliaca y que ha sido la encargada de presentar la iniciativa junto a la concejal de Comercio, Raquel Ruiz.
Pese a que cada vez es más común encontrar establecimientos que tienen productos sin gluten, a veces la garantía no es total, lo que dificulta la tarea para los celíacos. En este sentido, Téllez ha explicado que “los enfermos celiacos necesitamos poder salir y comer sin gluten pero sin trampas, que eso es parte de la problemática que tenemos. Que puede haber contaminación cruzada. Hace falta que los interesados estén formados con un protocolo adecuado para que nosotros podamos ir tranquilos y no contaminarnos. Fui haciendo llamadas a hotelería y hostelería y sitios que quieren participar y formaremos esa red”.
Téllez ejemplificó de dónde pueden venir los problemas indeseados, al señalar que “nuestro veneno es el contacto cruzado. Si tengo una manzana, que no tiene gluten, y paso por encima unas migas, ya está contaminada. Si frío un cachopo en una sartén en la que antes freí algo con gluten, lo estoy contaminando. O las freidoras”.
Este proyecto de crear una red de establecimientos ofrecerá una formación que darán unos técnicos y que permitirán a esos locales contar con una catalogación propia, de forma que en el momento en el que pasen la formación, se les dará un sello como establecimientos asesorados por la asociación Viviendo sin Gluten y pertenecerán a la red Avilés sin gluten.
Para concluir, Téllez afirmó que "las personas celiacas no podemos improvisar, y cuando viajamos o queremos salir a cenar, tenemos que tener sitios que sabemos que cumplen esos protocolos”.