Recientemente abrió sus puertas en Madrid Fantasía de Chocolate, un espacio dedicado exclusivamente a este alimento que no se limita sólo a vender bombones y tabletas tradicionales, sino que va más allá por la sofisticación de sus curiosos escaparates y, sobre, todo por incorporar entre sus productos numerosas variedades de chocolates elaborados sin gluten y aptos para celíacos.

Tras los cristales de su escaparate se pueden contemplar trozos de pizza, fuets, huevos fritos, minibocatas, flores de colores y hasta preparados para fabada, todos ellos, bien dulces. "Lo fabricamos nosotros con una base de chocolate belga de gran calidad", comenta Paloma Jareño, directora de márketing de la casa.

La idea comenzó en el año 2007 con las fuentes de chocolate, unas impresionantes cascadas -disponibles en 1,70 y 2,10 metros de altura- que instalan, previa petición, en todo tipo de eventos, desde bodas hasta fiestas de empresa. La estructura se puede bañar de chocolate blanco, con leche y negro, y se suele acompañar con fruta o repostería.

Cuando el grupo de comensales supera las 150 personas, preparan un Candy Bar con todo tipo de chucherías. Así, poco a poco, han conseguido unas 1.200 referencias, entre las que destacan sus numerosos artículos aptos para celíacos y para quienes tienen alergia a los frutos secos.

Y, también, sus flores de peladillas de chocolate hechas a mano que venden sueltas o en ramillete, perfectas para hacer un regalo...

Este local es perfecto para no desquiciarse en la búsqueda del detalle perfecto porque ofrece desde artículos de chocolaterapia (exfoliantes, aceites, bombas de baño...) hasta licores a base de chocolate o fundas para iPad con forma de tableta.