La cafetería malagueña El Artesano acaba de incluir en su carta churros tejeringos, chocolates y bocadillos sin gluten, una iniciativa muy aplaudida por las personas con esta intolerancia de la provincia.
Desde hace solo algunos días, este local de Churriana incluye en su carta churros para celiacos hechos con una mezcla de harinas de maíz y de arroz. La receta es el fruto de muchos meses de pruebas hasta dar con el mejor resultado.
"Pretendíamos que supieran igual que nuestros clásicos tejeringos y de hecho los hacemos exactamente de la misma manera, con la jeringa, y por lo que nos cuentan los clientes el resultado es bueno. Es más, hay un matrimonio en el que él prefiere tomar los de su mujer celíaca porque dice que al no llevar trigo y ser más ligeros les gustan más", señala Cristina Luque, gerente del establecimiento, quien revela que la idea de poner en marcha este proyecto se la dio un padre, que logró tocarle la fibra hace ahora un año.
"Me dijo que me daba lo que le pidiera para que le hiciera churros a si hijo, y me dio tanto sentimiento que decidí investigar el tema. Ya había ampliado el local y hecho reformas, así que me pareció que era una buena forma de expandirme abriéndome a nuevos sectores como el de los celiacos, donde cada vez hay una mayor demanda", detalla.
Dicho y hecho. Con la idea en la cabeza, esta empresaria -que lleva 15 años sirviendo churros en El Artesano- empezó a documentarse sobre la enfermedad y a buscar nuevos proveedores. Para avanzar en esta nueva aventura buscó el asesoramiento del Área de Sanidad del Ayuntamiento de Málaga y de la Asociación de Celiacos de Málaga cuya ayuda, dice, ha sido decisiva para sacar adelante su iniciativa.
"Hemos tenido que adaptar el local y hacer obra para crear una habitación separada donde cocinar los churros. Todo tiene que estar aislado: el aceite, los utensilios...no podíamos correr ningún riesgo. Empezamos con los bocadillos y desde el pasado miércoles servimos los churros", sostiene.
Cristina admite que la aceptación ha sido buenísima. "En los cinco primeros días hemos vendido más de 300 churros para celiacos. Nos está viniendo gente de toda la provincia, que se están enterando del boca a boca y a través de redes sociales y la verdad es que estamos muy contendos", añade Luque. "Esto es un notición. Algo que todos los celiacos estábamos esperando. En los grupos de Whatsapp no se habla de otra cosa".
La noticia ha sido un "bombazo" entre los enfermos de la provincia -unos 1.600 según los últimos cálculos de la asociación. "Esto es un notición. Algo que todos estábamos esperando. Una vez intenté hacerlos yo en casa pero me salió 'un churro' nunca mejor dicho. Hoy de saber que venía estaba nerviosa y todo. Están muy conseguidos, así que muy contenta".
De momento, al ser la semana de lanzamiento, El Artesano está cobrando los churros sin gluten al mismo precio que el resto, pero la idea de Cristina Luque es subirles 10 céntimos, "porque sino no nos salen las cuentas". Su coste será pues de 0,45 euros la unidad y con motivo del Día Nacional del Celíaco, el próximo 27 de mayo, la cafetería organizará una chocolatada con churros gratuita, "a los que está todo el mundo invitado", concluye.